Luego de una larga procesión de tres días, más de 200.000 fieles llegaron hasta la ciudad de Loja, llevando la imagen de la Virgen de El Cisne, en una romería tradicional que se viene repitiendo año a año desde 1826. Los fieles recorren los parajes ubicados entre el Santuario de la Virgen de El Cisne y Loja, por un trayecto que tiene unos 75 km de distancia.
Este tradicional recorrido se va haciendo por tramos y siempre encabezando con la imagen sagrada que es conocida cariñosamente por la gente como “La Churona”. Varios grupos de policías se han ido rotando para llevar en hombros la estatua de la Virgen, que viaja protegida dentro de un cajón de cristal pero que deja ver su imagen al pueblo que sigue con devoción el paso de la misma.
En la ciudad de Catamayo se inició el último trayecto que son unos 35 km, en donde se formó el grueso de esta procesión para llegar a la entrada de Loja con una gran multitud de seguidores encabezados con la virgen que para esta oportunidad vistió de celeste. “La Churona” no sólo es famosa en este país, sino que también llegan a verla muchos fieles de otros países, en especial del norte de Perú y también de Colombia.
Debido a la importante cantidad de gente que sigue esta procesión, varias instituciones y organismos del Estado, han tenido que desplazar a cientos de personas para realizar diferentes tareas de apoyo, como vigilancia y asistencia a los fieles, ayudando a que todo transcurra de la mejor manera posible.