El volcán Tungurahua ha disminuido su actividad y la mayoría de las familias que estaban evacuadas están comenzando a regresar a sus casas. Muchas de las personas que estaban en el albergue ubicado en Cotaló en Pelileo, han vuelto a sus actividades ya que son netamente agrícolas y tienen que cuidar sus tierras para no perder su producción.
Las personas que aún permanecen en los albergues se han organizado de buena forma para mantener su subsistencia, ya que por el día las mujeres y los niños se encargan de la cocina y los hombres se van a cuidar sus terrenos en las zonas de riesgo como Cusúa en Tungurahua, y Bilbao y Penipe en Chimborazo, para regresar por la noche a reunirse en los albergues.
El Instituto Geofísico de la Politécnica Nacional ha informado que el volcán Tungurahua mantiene una actividad moderada, con un mayor número de sismos pero de menos intensidad. Según Benjamín Bernard, vulcanólogo francés del Observatorio Vulcanológico Tungurahua (OVT), ubicado en el sector Guadalupe de Pelileo, la actividad no ha variado mucho en las últimas 36 horas, registrando explosiones de moderadas a fuertes, con tremores de tierra y ventanas.
Debido a las condiciones del clima se han podido observar hongos de hasta un kilómetro de altura cargado con vapor de agua, gases y poca ceniza. Desde las 15:00 horas del pasado sábado, hasta las 15:00 de ayer hubo 237 explosiones y 71 episodios de tremor de emisión. Si bien no se ha reportado nuevas caídas de ceniza, si se registraron ligeras lluvias en la ciudad de Baños sin que produzcan lahares”, señala el informe del Instituto Geofísico.